Cómo editar un libro: las 7 fases de la edición con Editorial Tregolam

Seguro, más de una vez te has preguntado sobre editar un libro de manera profesional. Ya tienes tu historia. Después de meses, incluso años, abriendo el mismo documento, escribiendo, borrando, reescribiendo y dándole vueltas a las tramas de tu libro, sientes que por fin está completo. No obstante, aún debes darle forma, convertirlo en un libro “real”. Es decir, debes empezar a pensar en la edición. En este punto, seguramente te surjan infinidad de dudas y la pregunta: ¿cómo editar un libro? Pero te aseguramos que todo es más sencillo de lo que parece cuando se trata de la edición de un libro con Editorial Tregolam. Sigue leyendo para comprobarlo.

Ante todo, debes tener en cuenta cómo editar un libro para poder avanzar en tu misión. Por supuesto, editar un libro no es tarea para niños. Si quieres que tu libro luzca tan bonito y brillante como los que hay en los escaparates, tendrás que ir olvidando las plantillas y las ediciones automáticas. Lo mejor es que deposites tu confianza en Editorial Tregolam, pues contamos con los medios y el personal adecuado. Cada profesional está especializado en un área (corrección de textos, diseño de portadas, difusión…) para darle a tu libro la calidad necesaria y un aspecto digno.

Ponte en contacto con nosotros; te pediremos que nos mandes la obra, la valoraremos y te pasaremos una tarifa para publicar tu libro. Si estás conforme, realizaréis un contrato de edición muy simple (recuerda que en Tregolam los derechos de la obra siempre te pertenecen a ti) y después comenzaremos con el resto de acciones.

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1. Contrato de edición

Todas tus dudas sobre cómo editar un libro solucionadas y finalmente presupuesto aceptado. Ahora toca echar una firmita para que el acuerdo tenga validez legal. Sabemos que los contratos pueden dar un poco de miedo. Es normal. Al fin y al cabo, estás arriesgando tu proyecto y tu dinero. Sin embargo, los contratos con las editoriales suelen ser bastante llanos y no difieren de cualquier otro en esencia. La clave siempre es leer bien y asegurarse de tener todo claro. Claro está que cada editorial tendrá sus propias condiciones y el contrato variará en función de los servicios concretos que te interesen.

En el documento que firmaremos, se especifican tanto las obligaciones como los derechos que la editorial y tú, el autor, tenéis. Debe detallar los servicios contratados, por ejemplo, corrección de texto, maquetación para libro electrónico o papel, cantidad de ejemplares, características del libro impreso, etc. Así como la duración y especificaciones de los mismos y el coste. Sin olvidar lo más importante: los derechos de autor. Al contrario de lo que sucede con los grandes sellos, seguirán siendo tuyos y estarán libres de cláusulas abusivas.

1.1. ¿Mi libro está seguro?

Cuando enviamos nuestra idea por mail, surge cierta intranquilidad, el temor de que pueda utilizarse de manera indebida. No debes preocuparte por eso. El propio contrato recoge los aspectos relacionados con la confidencialidad, tanto de tu libro como de tus datos. La editorial se asegurará de que tu trabajo esté seguro, a salvo, y de que no sea utilizado más allá de lo establecido. En este artículo puedes enterarte un poco más sobre el Registro de la Propiedad Intelectual de tu libro.

1.2. ¿Y si decido anular el contrato?

Editorial Tregolam recogen en su contrato la posibilidad de anularlo sin problemas. Al trabajar con nosotros, puede suceder que, tras haber publicado un libro, decidas invalidar vuestro acuerdo por equis motivos. Ejemplo: otra editorial te ha ofrecido mejores condiciones o algún extra, y crees que el cambio podría ser provechoso. Si sientes que debes hacerlo o es una ventaja clarísima, podrías anular el contrato sin ningún tipo de perjuicio legal para ti o para la nueva editorial que quiera adquirir tu obra. Como decíamos, los derechos te pertenecen a ti y tú eres quien decide dónde llevas tu libro. En cuyo caso retiraremos el libro de las tiendas de venta, se anula el ISBN y eres libre.

2. Maquetación: indispensable a la hora de editar un libro

Por muy bien estructurado que esté tu manuscrito en un documento Word, hay que procesarlo para llevarlo a la imprenta o distribuirlo en formato ebook (ePub, Kindle, .mobi). Los profesionales de la editorial harán que tu libro esté a la altura de los editado por los grandes nombres del sector.

Maquetar es organizar, estructurar, diseñar y distribuir los elementos del texto correctamente para una perfecta presentación y lectura. Va más allá de esbozar una portada bonita, es como tu DNI editorial. Tu nombre es una de las primeras cosas que se ven al elegir un libro, ¿quieres que se asocie a un diseño desastroso? La calidad del relato no basta; exteriormente, también debe parecer una obra maestra. Hay que cuidar todos y cada uno de los detalles, como si esa fuera la tarea más importante de tu vida. Una buena maquetación dará a tu libro la apariencia profesional que buscas. Así agregarás valor y atraerás las miradas de compradores finales (lectores) y de agentes literarios.

Un profesional de la maquetación sabrá, entre otras cosas:

• Añadir un estilo seductor e interesante, acorde al producto editorial que está tratando.
• Maquetar según el género del libro: novela, ilustración, cuento, poesía…
• Dar a las imágenes una calidad óptima. El mínimo es 300 píxeles por pulgada y, si el libro se va a imprimir, hay que convertir a CMYK (colores primarios más el negro).
• Aplicar márgenes según la posición de las páginas (derecha o izquierda).
• Adaptar ese formato A4 que tienes en .doc (tamaño folio, llanamente dicho) a las dimensiones que quieras proporcionar a tu libro.
• Ordenar y diseñar los encabezados y pies de página.
• Elegir el formato adecuado para enviarlo a la imprenta.

Además de todo esto, un buen maquetador pensará automáticamente en las llamadas páginas de cortesía. Sí, esas hojas en blanco o con poco texto que flanquean la novela. Este tipo de páginas se suelen adjudicar a las dedicatorias, citas de otros autores, agradecimientos, presentaciones al lector, información de la biblioteca pública, etc. Para saber más sobre ellas, puedes consultar este artículo que publicamos recientemente.

3. Corrección de textos

Quizá hayas pedido a un amigo, a un profesor o a un conocido que revise tu texto para mejorarlo. Puede que incluso tú mismo seas un hacha con la corrección de ortografía y la puntuación. Aun así, te recomendamos que solicites la corrección de un profesional. Él realizará varias lecturas del texto con mayor atención, tiene un ojo clínico y está entrenado para detectar y solventar errores. Además, conoce las normas de la lengua y las lleva al día.

Recuerda que una buena corrección de textos llega más lejos de la ortografía. No solo se trata de tildes, comas, puntos, mayúsculas, escribir una palabra perfectamente… También hay que revisar posibles espacios dobles (o triples, no es una locura encontrárselos), omisión de caracteres, cacofonías, errores gramaticales, cursivas, comillas, sintaxis o títulos, los cuales deben estar bien jerarquizados. Es decir, es un proceso de corrección ortotipográfica, total.

4. Diseño de portada

Igual que sucede con la corrección de textos, puede que hayas encargado el diseño de portada a alguien de tu entorno. Ten muy presente que, cuando se edita un libro, hay que olvidarse de los gustos personales. Y esto se aplica tanto en la portada y contraportada como en aspectos tan básicos como la elección de la tipografía. Claro que debes estar conforme con la portada, pues lo que hay detrás es tu trabajo, el fruto de tu esfuerzo. Tienes que sentirlo tuyo al 100%.

Pero esto no tiene nada que ver con dejar que tus gustos intercedan con lo que es mejor para tu libro. Por ejemplo, que te guste el verde no significa que debas poner hasta tu nombre en ese color. De igual modo, deberías huir de los clichés: si es una historia de amor, huye de las portadas ñoñas. Nuestros diseñadores profesionales velarán por el futuro de tu libro; realmente se preocupan y se esfuerzan en su trabajo. Si no, mira los diseños de Tregolam.

4.1 Diferenciarse en un sector saturado

Con todos los libros que hay por Amazon, Casa del Libro, Fnac, etc., ¿cómo los lectores van a fijarse en ti? ¿Por la sinopsis? No. Antes de leer esta, deben haber recibido un estímulo que les ha llevado a coger tu libro: la portada. Para comprar, primero hay que ver. Imagina que una persona escoge un libro que está justo al lado del tuyo. ¿Crees que lo habrá visto? Seguramente, ni se haya percatado de su existencia y, si lo ha hecho, le ha resultado tan del montón que no ha querido malgastar su tiempo. Suena cruel, hasta exagerado, pero la realidad es que nadie mira libro por libro. O vamos a tiro hecho o buscamos algo que capte nuestra atención. Asociamos buena imagen a buen contenido, así de simple.

Por eso, es tan importante que alguien con visión global (creativa y comercial) se encargue de vestir tu libro. Si te has esforzado tanto con tu historia, ¿por qué dejar lo demás al azar? Asimismo, ese profesional tendrá en cuenta el tipo de encuadernación y, por tanto, las medidas a las que debe adaptarse la portada.

5. Impresión de los libros

Después de superar las fases de edición anteriores, y haber resulto la duda de cómo editar un libro, llega el momento de prepararlo para la impresión. Antes comentábamos que las imágenes deben tener un mínimo de calidad y estar en modo CMYK. Pero también hay que tomar algunas decisiones más que podrán encarecer o abaratar los costes, aunque no debes preocuparte, en Editorial Tregolam nos ocupamos de todo.

5.1 Tipo de papel y gramaje

Hay tres tipos de papel especiales para editar libros:

• Offset: como un folio, blanco reluciente. Más barato, pero más apropiado para los libros de textos o de divulgación que para la ficción. Su gramaje es de 80-90 gramos, por lo que es conveniente en libros extensos.
• Ahuesado: el más común en novelas y poesía. Tiene color amarillento y es más rugoso al tacto que el anterior. Aunque resulta más caro, es adecuado para libros con muchas páginas, pues su gramaje también oscila entre los 80-90 gramos.
• Estucado o satinado. El más empleado en ilustraciones, cómics, álbum infantil o cualquier libro que requiera de impresiones a color, ya que proporciona una impresión de mejor calidad. Es el más caro y su gramaje ronda los 115 gramos para dar opacidad, aunque puede variar dependiendo del tamaño del libro. Eso sí, cuanto más gramaje, más costosa resulta la impresión.

5.2 ¿Brillo o portada mate?

El brillo suele asociarse con una mayor nitidez y colores más brillantes, por lo que se convierten en una buena opción para las novelas y los cuentos. Sus desventajas son las posibles ralladuras que se producen por el uso y el reflejo de la luz en ciertos ángulos, algo a tener en cuenta si el libro va a ser fotografiado para la promoción.

El mate, por su parte, elimina esos reflejos insidiosos y resulta más discreto. Por esta razón, es una buena opción para trabajos más formales. El contra es que los colores no aparecen tan saturados ni vibrantes.

5.3 Encuadernación.

Encontramos dos tipos: tapa blanda o rústica frente a tapa dura o cartoné. La primera hace que el libro sea más flexible y manejable, obteniendo una lectura más cómoda. Esta encuadernación es muy económica y suele utilizarse en la mayoría de los casos. La segunda, en cambio, posee mayor calidad.

En este artículo encontrarás más detalles sobre las características para imprimir tu libro. ¿Qué debes saber a la hora de imprimir un libro?

6. Venta y distribución

Aquí llega la logística: es hora de llevar tu libro hasta los lectores. La editorial Tregolam, funciona por el sistema de impresión bajo demanda. Esto quiere decir que el libro no se imprime y envía hasta que un cliente lo ha comprado mediante una tienda online o física. Esta venta, a su vez, genera automáticamente un informe para la distribuidora, la cual debe enviárselo al comprador.

Las tres ventajas principales de la impresión bajo demanda en la edición de libros son:

• Los libros siempre se encuentran disponibles y en stock.
• En relación al punto anterior, se garantiza la provisión, calidad y precios en todo el mundo.
• Disminuyen los riesgos y la inversión también es menor.

7. Difusión de la obra una vez editada

Ahora que está todo preparado, ¿cómo hacer que te conozcan? La promoción de tu libro es algo que deberías planear en cuanto acabes de escribir. No esperes a tener un ejemplar en las manos para abrirte una cuenta en las redes sociales y hacer un web deprisa y corriendo, sin ninguna estrategia. Como hemos mencionado antes, sé profesional con todo. Dedica el mismo esfuerzo que empleas en escribir (o más) a cada cosa que hagas.

Hay cientos, miles de escritores noveles que, al igual que tú, están esperando su oportunidad. No es fácil entrar en este mundillo. A todas las fases de edición anteriores, hay que sumar otras acciones. Al contratar los servicios de una editorial profesional como Tregolam, nos encargamos de la publicidad de tu libro. De esta forma, lograremos dar visibilidad a tu obra y a ti, te haremos diferentes al resto. Así, os abriréis paso en los medios de comunicación oportunos y relevantes. Nuestros servicios de difusión que te ofrecemos son múltiples: mailing, promoción en redes sociales, entrevista o vídeo entrevista, crítica literaria o reseña, nota de prensa, etcétera.

Y no olvides nunca poner de tu parte: comparte, difunde, genera opinión, diseña una web… Llama a tus lectores potenciales. Puedes conocer las claves fundamentales de nuestros servicios para difundir un libro aquí.

¡Tachán! Libro editado

Como puedes comprobar, solo bastan siete sencillos pasos para que hagamos realidad tu sueño de editar un libro. Ya tienes las respuestas sobre cómo editar un libro, y no era tan complicado. Todo es más fácil cuando se cuenta con la información necesaria y con grandes profesionales como los que forman parte del staff de Editorial Tregolam, que te aconsejan y acompañan en el proceso. Tu libro es un tesoro y merece el mejor trato.

Si deseas editar tu libro mediante una Editorial de coedición profesional, ingresa aquí » Editorial Tregolam

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