Entrevista a Ana Flora Álvarez, autora de «Conociendo a tu monstruo»

¡Bienvenida, Ana Flora! Es un placer poder hablar contigo sobre tu obra Conociendo a tu monstruo (editorial Tregolam). Este libro interactivo de desarrollo personal lleva al lector a adentrarse en el laberinto de su vida. Dependiendo de la decisión que tome, la aventura lo guiará por distintos caminos. Y el objetivo es conocer al monstruo que habita en su interior.

Esta es tu primera obra. ¿Siempre quisiste publicar un libro? ¿Cómo ha sido la experiencia?

Gracias. Pues en realidad, y ahora que lo preguntas, recuerdo que desde pequeña ilustraba y escribía mis propios cuentos con varios folios que grapaba a modo de encuadernación (o sea, que yo misma me «autoeditaba»). No lo había contemplado como algo tangible, desde luego. Y aunque siempre me ha gustado escribir y dibujar (y he ilustrado ya algún cuento), la publicación de un libro me parecía algo bastante laborioso.

La experiencia ha sido bastante «laberíntica». Comencé escribiendo para dar contenido a las ilustraciones que salían de mí a borbotones después de leer una obra que me había inspirado y… engordó hasta convertirse en un pequeño libro. En principio, lo hice con la esencia de acompañar al crecimiento personal del lector. Pero, como casi todas las cosas de la vida, terminó siendo parte de mi propia transformación, y todavía sigue siéndolo.

Ahora este libro me insiste en que quiere ser compartido y no olvidado en un cajón.

El libro paralelo al mito griego de Teseo y el Minotauro. Es decir, como Teseo, el lector se adentrará en un laberinto en busca del monstruo en su interior. ¿Cómo surgió la idea para escribirlo?

Desde pequeña, el mito de Teseo y el Minotauro me llamó la atención. Ahí estaba, esperando a que le diera mi propio sentido. Cuando leí el libro de Tara Goleman Alquimia emocional, no sé todavía cómo, todo encajó perfectamente para que, a mi manera y siguiendo «el hilo conductor», contase todo lo que quería transmitir. Pensar que podemos, como Teseo, iniciar una aventura por nuestros laberintos internos (que ahora sé que se reflejan en los externos) para encontrar ese monstruo e imaginar que puede haber otros finales diferentes o alternativos al que nos han contado me abre tantas puertas a la creatividad…

Esta es una obra de «elige tu propia aventura». ¿Ha sido muy complicado elaborarlo? ¿Qué método utilizaste para organizar todas las posibles opciones?

Un poco sí. Fui una apasionada de los libros «elige tu propia aventura» en mi adolescencia. Desde entonces, cuando leo otros me imagino diferentes posibilidades y caminos a los que describen. Incluso en mi vida ya me cuesta elegir uno de ellos y me gustaría (a veces lo hago) volver atrás e ir por otro diferente. Y eso, costase lo que me costase, es lo que quería para este libro. Sí, ha sido complicado. Cuadrar historias con su hilo conductor en cada página y que el lector pasara, como en la vida, por todas las opciones no me fue fácil. Tampoco que, al mismo tiempo, cuadrara con la maquetación de las ilustraciones y demás. Os he vuelto un poco locos, ¿verdad? Además, soy un poco caótica y laberíntica de por sí. Me divirtió, lo reconozco, pero me fue complicado.

El método… Intentar, por todos los medios, que el aprendizaje para el lector aventurero fuera el más extenso pasando por todas las opciones posibles.

Todas las ilustraciones del libro las has creado tú. ¿Tenías una idea clara de cómo querías que fueran? ¿Las dibujaste según escribías el libro? ¿O las tenías preparadas antes del texto? ¿Cómo ha sido poder plasmar tu arte en él?

Sí, todas las he creado yo. No tenía ni idea, eso sí. Me sorprendió la simplicidad con la que iba creando los dibujos, como si ellos estuvieran deseando transmitir su fuerza. Y, el crearlas desde un soporte digital, casi nuevo para mí, me dio la oportunidad de experimentar. Mi hija, que estudia Bellas Artes, me comentó que el ser de luz era realmente un 6 y un 4, «la cara de tu retrato», más expresiva que había visto. Y en cuanto a si las tenía preparadas… no, en absoluto. Según escribía, las imágenes en mi cabeza ya querían escaparse a través de mi mano y ser plasmadas en un papel.

Pues, ahora que lo pienso y siento, no creo que pudiera escribir un libro sin plasmar mis dibujos en él. Es como si una cosa no se complementara sin la otra.

Este es un método distinto y muy original para conocerse a uno mismo. ¿Crees que podría ser de gran ayuda en la terapia creativa?

Gracias. En realidad, esto es algo que buscaba. He leído muchos libros de autoayuda y de crecimiento personal a modo profesional, ya que soy terapeuta, y personal, sobre todo. Me han servido de gran ayuda y me han inspirado. No sé si existe otro libro con este método, pero lo he hecho un poco a mi imagen y semejanza, a mi modo de entender cómo me alcanza el crecimiento y la consciencia. Esto es, eligiendo y viendo que existen varios caminos para «llegar», aunque sin restarle la importancia al principal y a la aventura. Es más, la verdadera terapia (y llevo aprendiendo de ello más de 25 años) es el caminar dándose cuenta de ello. Me considero una terapeuta creativa, ya que dentro de mi cabeza y mi corazón tengo la facilidad de poder ofrecer otras vías y otros paisajes.

Algo muy positivo de la obra es que los lectores pueden volver a leerla una y otra vez dependiendo de su estado emocional. ¿Es posible llegar a un autoconocimiento total?

(Risas). El autoconocimiento total… Creo que no se llega fácilmente. Solo pretendo ofrecer diferentes caminos. Todos están bien, solo tienes que ir por donde sientas más paz y coherencia. Y, sobre todo, quiero dar a entender que lo importante es transitar por el laberinto, conocer y conocerse. Para mí eso ya es suficiente.

El objetivo de esta aventura es conocer al monstruo que había en nuestro interior. ¿Cómo consideras que se enfrentarán los lectores a este hecho? ¿Piensas que la gente suele ocultar o ignorar a su monstruo en vez de conocerlo por miedo?

El objetivo… no lo tengo muy claro. Sí, puede que en principio pudiera ser ese. Pero, en realidad, mi objetivo es el «transitar» y aventurarse a conocerse… Luego el resultado tiene muchos caminos y salidas. Incluso puede que el lector llegue al manual de monstruos y se encuentre con él o no. Puede que el monstruo que conozca tenga más atributos que igual no están expuestos en el libro, pero eso no es tan importante. Lo prioritario es recordar que está ahí, buscando. Yo se los iré mostrando, pero puede que el lector vea más, yo no estoy en la cabeza de todos (risas). Más allá, mientras se atreva a conocerlo… o no, sigo pensando que todo está bien. Y, como bien comentas, dependerá, como en la vida, del momento, la aptitud y las ganas, pero ahí sigue el libro para cuando quieras abrirlo y comenzar de nuevo o continuar.

Solemos oír y ver a este monstruo, pero es complicado armarse de valor e indagar de dónde vienen sus alaridos, o destapar o abrir esa puerta, no sé si por miedo, pereza… Lo que sí sé, por mi experiencia, es que se alcanza más coherencia y paz si lo conoces y te conoces de manera más amplia.

Dependiendo de las carencias que tengan, los lectores pueden construir a su propio monstruo. ¿Ha sido divertido elaborar este proceso? ¿Cómo relacionaste el aspecto físico con los diversos sentimientos negativos?

Sí, ha sido muy divertido y no tan fácil. Pero traté de ordenar a mi manera lo que me inspiró del libro de Tara Goleman, con la diversidad de matices que tiene, y clasificarlo de tal manera que me encajase con atributos monstruosos. Aun así, me pareció divertido poder ponerle imagen en forma de atributo monstruoso a estas carencias. Aunque muchas veces también es complicado, porque cada uno ponemos imagen a algo de manera diferente.

El libro cuenta con muchas citas de autores célebres y fragmentos de otras obras. ¿Cómo influyen estas a la hora de recorrer los pasillos del laberinto?

No lo creerás, pero las frases me aparecían por todos los lugares, como si quisieran colocarse en el libro reafirmando lo que iba describiendo, incluso los poemas. Me resonaban como mantras que se repiten cuando necesitas aferrarte a algo para continuar en los momentos más difíciles.

En relación con la pregunta anterior, en la obra también aparece un pequeño poema llamado «Mi monstruo». ¿Escribes poesía? ¿Te gustaría explorar otros géneros literarios?

(Risas). Me he aventurado también por esa senda. Como cita mi padre: «Qué atrevida es la ignorancia». Bueno, como os he contado en la pregunta anterior, esas frases y poemas solo esperaban el hueco para ser colocadas. Tengo poemas, pero por ahora están en una libreta.

Tenemos muchas ganas de volver a leerte. Dinos, ¿estás trabajando en algún otro libro? Si es así, ¿podrías decirnos qué temas trata?

Bueno, esto es como parir a tu hijo. Si nada más hacerlo te preguntan: «¿Tendrías más hijos?», por ahora diría que no. Pero seguro que más adelante igual me pide un hermanito. Por ahora, quiero alimentar y disfrutar a este primero y que llegue su esencia.

Para terminar, ¿hay alguna cuestión qué te gustaría compartir con tus lectores?

Esta pregunta me da mucho que pensar. Por un lado, creo que simplemente lo dejaría así, para que con la lectura del libro surgieran mil cuestiones personales. Pero, por el otro, podría compartir tantas cosas que… En fin, solo quiero decirles que me lo he pasado muy bien creando este libro desde mi ser de luz y desde mi monstruo. Y claro, desde otros seres de luz y monstruos con los que me he encontrado a lo largo de mi vida. Para mí está siendo una aventura apasionante que ni yo misma intuía antes de escribirlo. Ahora me gustaría soltarlo y que su esencia de descubrimiento personal dentro de nuestro laberinto empape al lector que decida abrir este libro tan apasionadamente como a mí. Sé que esta obra no termina aquí, sino que crecerá con la lectura y el feedback de mis lectores con la finalidad de que cada vez sea más ¿perfecto? Ahí ya está de nuevo mi monstruo.

¡Gracias por explicarnos un poco más sobre tu obra, Ana Flora! Esperamos que tenga mucho éxito. Conociendo a tu monstruo ya está disponible en librerías.

Nombre: Ana Flora Álvarez
Obra: Conociendo a tu monstruo
Género: psicología, construye tu propia aventura, crecimiento personal
Sinopsis: Imagina la gran aventura de tu vida. Caminos y pasadizos que te llevarán a conocer algo que siempre ha estado ahí, esperándote y no sabías cómo encontrarlo. Este laberinto te ofrece mil posibilidades para llegar a su centro que resulta ser TU CENTRO.En este libro interactivo te encontrarás con códigos QR que te llevarán a contenidos multimedia (vídeos, audios y más) que enriquecerán tu lectura.Si abres este libro, te adentras en él y te dejas traspasar por la experiencia de cada paso, te descubrirás liberando patrones y permitiéndote avanzar más ligero y en paz.
Todos tenemos un alma aventurera… Sí, tú también.
Biografía: Ana Flora Álvarez (Madrid, 1972) terapeuta creativa, ilustradora y aventurera de los caminos de la consciencia. Comenzó desde muy joven a investigar sobre las dimensiones del ser humano y motivada por la inquietud de conocer todo lo que tenga que ver con el SER y la consciencia se formó en Terapia Ocupacional y psicología Gestalt, Arteterapia y múltiples técnicas y terapias de sanación integral.Su inquietud por el conocimiento y al arte como puerta de acceso a muchas posibilidades terapéuticas le conceden una larga experiencia colaborando como docente en proyectos de educación sexual y emocional* en centros docentes e impartiendo talleres y cursos que compagina con su consulta donde sigue aprendiendo de los demás.En este su primer libro pretende aunar sus tres pasiones: el autoconocimiento, la ilustración y la terapia creativa.
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