Reseña sobre 'La familia Carrillo', novela de Valeria Carrillo

Reseña sobre ‘La familia Carrillo’, novela de Valeria Carrillo

Valeria Carrillo se inició en la literatura de forma autodidacta, publicando sus escritos en Facebook para poder compartirlos con una comunidad en la que poder intercambiar opiniones y seguir aprendiendo. Poco a poco, una de esas historias cobró fuerza y la autora, arrastrada por la vivacidad de sus personajes, sintió que había llegado el momento de dar un paso más en su carrera. Así fue cómo llegó a publicar un libro: La familia Carrillo, su primera novela.

La familia Carrillo nos presenta a Paul, un fan incondicional de los libros de una misteriosa Valeria Carrillo. La escritora es completamente anónima, nadie ha podido entrevistarla nunca y poco (o nada) se sabe de ella realmente. Paul, nuestro narrador, siente curiosidad por saber quién es la verdadera Valeria, la persona detrás de las páginas. Está convencido de que, a través de sus novelas, la conoce.

Lo primero que encontramos, pues, es un estupendo guiño a la esencia de la literatura, ya que, aunque nos desliguemos del narrador y de los personajes, de algún modo, nuestra voz como escritores queda impregnada en ellos. Quizá no seamos conscientes de cuánto de nosotros hemos dejado en cada página, pero formamos parte de las historias que inventamos y viceversa. Es como si un pedazo de nosotros, secreto e inconfesable, se desdoblara para crear otra realidad. La literatura no puede entenderse sin todo aquello que vivimos y que somos. Y este guiño se ve reforzado por el nombre común entre la autora de la ficción y la escritora real.

La novela empieza en el presente, después de que Paul haya podido conocer a Valeria, de manera que ya tenemos una miguita de pan que picará nuestro apetito: ¿qué ha pasado? En este punto, nosotros somos la figura del padre Gabriel, confesor y amigo del protagonista, puesto que no nos quedamos como meros agentes ajenos a la historia, sino que la autora nos quiere convertir en un personaje más. Nos trasladamos a la historia en calidad de confidentes y cómplices de Paul, dejándonos intrigar por él y seducir por Valeria, impredecible e indomable. Tanto ellos dos como el resto de personajes son fuertes, aparecen en nuestra mente de un chasquido gracias a la pericia de la autora para darles credibilidad y volumen a sus vivencias, psicología y acciones.

Valeria Carrillo parte del “chico conoce a chica y se enamora”, pero convierte la novela en una experiencia fresca y con encanto. La historia que se desarrolla después de esa premisa es imaginativa y completamente diferente al prototipo del género. A pesar de su vestimenta romántica, tiene tintes oscuros, un halo de misterio, fantasía y suspense que desata un universo infinito de posibilidades. Todo puede pasar en este relato de Valeria Carrillo y estar sujetos a esa ley nos fascina.

Nos perdemos por unos maravillosos paisajes que nos trasladan a las novelas clásicas de amor, lugares de amplios campos y naturaleza salvaje que parecen acompañar a los estados de ánimo de los personajes. Como si de un miembro más de la familia Carrillo se tratase, la casa donde se encuentran los protagonistas nos da cobijo y nos invita a cambiar la posición inicial del padre Gabriel por la de Paul. Cada vez estamos más cerca del huracán y, cuando alcanzamos el centro, ya no hay marcha atrás.

Este primer libro publicado de Valeria Carrillo es como una serie de televisión en la sobremesa, una de esas historias que hacen que hasta se te olvide que estás tomando un café y este termine por enfriarse. Resulta difícil abandonar la lectura, estamos en una constante incertidumbre donde cada suceso nos pone a prueba. Aunque vamos atando cabos, nunca logramos alcanzar la respuesta verdadera, nos perdemos por las tramas, los paisajes, los recodos del pasado… Tenemos la información delante nuestra, como Paul, como el periodista que es. Pero nunca podemos estar seguros de qué va a suceder. Y ese factor sorpresa es maravilloso, una delicia; especialmente, cuando se trata de novelas de corte romántico, donde parece que todo está dicho. En cambio, la imaginación nunca alcanzará un límite, siempre dejará abierta una puerta hacia nuevas historias, formas y dimensiones. Y La familia Carrillo es una de las llaves que abren esa puerta.

Nombre: Valeria Carrillo.
Género: novela romántica, suspense.
Bio: nacida en la ciudad de Guatemala y licenciada en Relaciones Internacionales, leyó su primera novela a los 10 años, El coronel no tiene quién le escriba, de Gabriel García Márquez. A esa edad, se sintió atraída por el mundo de la literatura y escribió algunos cuentos que nunca mostró a nadie.Tras estar desempleada durante el año 2016 y siendo una persona autodidacta, empezó a escribir algunos relatos y a publicarlos en grupos de escritores y lectores en la red social Facebook. Escribió La familia Carrillo, su primera novela, también durante ese año. Actualmente, desempeña el cargo de analista en la Dirección de Política y Estrategia de una de las Secretarías de Inteligencia de Guatemala. Vive en la ciudad, aunque le gusta el campo. Sin embargo, adora sentarse a ver pasar a las personas; de allí, dice ella: «Surgen mis mejores historias». Actualmente, vive con su mamá y sus tres hermanos. Su amado padre falleció en 2002 a causa de un cáncer de páncreas. Se considera a sí misma como una lectora compulsiva.

Libro: La familia Carrillo