Reseña sobre 'Caminar el tiempo', poemas de Pilar Ferrer Navarro

Reseña sobre ‘Caminar el tiempo’, poemas de Pilar Ferrer Navarro

Diez años después de debutar con Poemas de la consumación, Pilar Ferrer Navarro vuelve a sus orígenes literarios con Caminar el tiempo. Este nuevo libro publicado consta de tres partes bien diferenciadas por una pequeña introducción en cada una de ellas, las cuales están a cargo del grupo sueco Pain y su canción Coming Home. A partir de ahí, la autora hace un interesante y arrebatador despliegue de música, filosofía y mitología para desarrollar el tema principal del poemario que, como puede suponerse, no es otro más que el tiempo.

Estas tres divisiones llevan asociada una etapa concreta del tiempo, empezando de manera lógica por la juventud. Así, la primera parte contiene el espíritu de una juventud desafiante, sin miedo al camino que se abre delante de sus ojos; ese ímpetu del que mira al mundo sin miedo y dispuesto a ponerlo patas arriba, puesto que es consciente de que el horizonte queda lejos y que no va a cortar sus alas, sus ganas de volar libre y sin límites, sin barreras que interfieran con sus planes. El segundo bloque, por el contrario, tiene otro tono, ese matiz más oscuro y opaco que nubla la mirada: la confrontación de los sueños frente a la realidad. Cuando esta se produce, el espíritu rebelde de la etapa anterior percibe un sabor agridulce en la experimentación de la vida, pero aún se siente joven. Por eso, aún confía y no permite que sus anhelos caigan en picado hasta chocar con el suelo.

De forma ineludible, llega la tercera parte, donde la madurez y el cansancio se han instalado en los huesos. Los poemas reflejan la pesadumbre de no poder volver, la rutina y la nostalgia. Ahora el espíritu busca una manera de regresar a casa, a ese lugar idílico del que un día partió. En cambio, es consciente de que, para lograrlo, solo le queda la memoria, esa compañera que brilla incansablemente cuando la penumbra del presente amenaza y que protege el camino de vuelta al hogar (siempre ese Coming Home).

No obstante, los poemas escritos por Pilar Ferrer Navarro no solo se deslizan por la línea temporal con una emoción contenida que va desgarrando el interior poco a poco. Además, tal y como indicamos al inicio, y en contraste con esa permutabilidad, hay elementos constantes que enriquecen Caminar el tiempo y que lo dotan de un estilo único e incomparable. Estos son la música, la filosofía y la figura del cuervo, que ayuda a completar la atmósfera gótica que los versos emanan.

Las notas musicales se dispersan en múltiples estilos, todos con su propio espacio para acompañar los sentimientos de cada etapa. Encontramos, pues, referencias a clásicos como Las cantigas de Sevilla o Puccini, y una clara influencia del rock, el folk-metal y el heavy, reflejada en grupos como Nightwish. Sin olvidar la flauta del poeta, esa que le sirve para vaciar su alma de cansancio y dolor. En cuanto al componente filosófico, aparece la reflexión sobre la belleza, mientras que la mitología nórdica y celta se agitan al compás de las alas del cuervo, ese que nos conduce hasta el mismo Poe.

Caminar el tiempo está plagado de simbolismos que dejan tras de sí el halo nostálgico de una infancia a la que no se puede regresar. Sus versos son conmovedores; hay pasión, melancolía, rebeldía… Un sinfín de sensaciones que, mientras el tiempo empuja entre música y arte, nos van tocando y removiendo hasta alcanzar una evolución interna. Nos movemos al son de los poemas y quedamos atrapados en su melodía sin poner resistencia.

Nombre: Pilar Ferrer Navarro.
Género: poesía, prosa poética.
Bio: Pilar Ferrer Navarro nació en Carlet (Valencia). Es Máster Universitario en Gestión Cultural, Licenciada en Filosofía y Profesora de Flauta Travesera. Con la música a cuestas desde la infancia, ejerce como docente en Enseñanza Secundaria. Lectora ferviente y apasionada, dio el salto a la escritura con la publicación de Poemas de la consumación (Entrelíneas Editorial, 2007). Vive a caballo entre los kakis y los naranjos de su mediterráneo natal y el mar de viñas de Villarrobledo (Albacete), donde ha aprendido a amar el buen vino. A principios de 2018, ha publicado Caminar el tiempo con Uno Editorial.

Libro: Caminar el tiempo