Reseña de «Canyonlands: balada de una cuarentena», de JB Rodríguez Aguilar

Nada hacía sospechar que la pandemia que se estaba germinando en China cambiaría nuestro modo de vida anterior por otro adaptado a las horribles circunstancias que después brotaron por todo el mundo en el mes de marzo de 2020.

Esta situación provocó que muchas personas encontraran en el encierro una oportunidad para desarrollar muchas de las capacidades interiores que permanecían silenciadas, debido al ritmo de vida extenuante que caracteriza nuestro día a día.

De esta reflexión, cuyo eje fundamental fue el planteamiento de sopesar lo primordial en nuestras vidas a raíz de una reclusión que parecía perpetua, surge la novela del escritor y traductor JB Rodríguez Aguilar: Canyonlands: balada de una cuarentena.

En este libro introspectivo y rupturista, el autor nos cuenta la experiencia vivida durante el estallido de la covid por un fotógrafo norteamericano, llamado Mike Bradford, quien tras regresar de África por trabajo, se encuentra recluido en un hotel de Madrid pues el virus ha comenzado a causar estragos a nivel mundial.

«El director de la OMS, Tedros A. Ghebreyesus, declaraba en su rueda de prensa diaria: “Europa se ha convertido en el epicentro de la Covid-19, con más casos reportados de contagiados y fallecidos que todo el resto del mundo, a excepción de China”. Por otra parte, en el continente americano, los primeros brotes se concentraban precisamente en su país, en torno a dos focos principales: uno en la costa este, alrededor de la ciudad de Nueva York; y otro en la costa Oeste, en el estado de California. Donald Trump había declarado la Emergencia Nacional, si bien no había impuesto medidas de confinamiento o distanciamiento social».

Encerrado y lejos de Chicago, donde se encuentran su exmujer Jane y su hija Olivia, comienza a reflexionar sobre su vida y especialmente sobre un viaje que realizara al desierto de Canyonlands:

«El desierto, su inmensidad, su hostilidad, su aridez… La corpulencia de los cañones enmarcando aquel territorio fantástico, casi marciano. Canyonlands. Aquella aventura había supuesto para él, no solo un jalón en su carrera, sino un aprendizaje y un desafío a su propia entereza en condiciones de adversidad».

Mientras se suceden los acontecimientos en el exterior, Mike recuerda aquel momento en el que su vida cambió para siempre. Rodeado de naturaleza y de todo el espacio infinito, tuvo que luchar por una supervivencia en un contexto extremo.

En contraposición con la experiencia que está viviendo ahora, en donde él se ha convertido en una hormiga y su habitación en un hormiguero, intenta mantener la cordura con entrañables conversaciones que mantiene con su Olivia todos los días y con pensamientos que lo hacen viajar de vuelta a aquel desierto rojo y árido.

Conforme los días pasan, recluido en la habitación de un hotel en Madrid, las diferentes reminiscencias de su vida antes de la catástrofe vírica lo llevarán a tomar una decisión: debe contar al resto del mundo la crónica de la pandemia en Madrid. Por lo que decide escapar del hotel y plasmar con sus fotografías una realidad asolada de miedo e incertidumbre.

Dos tramas paralelas acompañan al lector a lo largo de esta novela pandémica: por un lado las reflexiones del presente, enfrentadas con aquellas del pasado.

¿Cuándo se propagó el virus en su matrimonio y se echó todo a perder? Ahora que está lejos de su hogar, ¿qué es lo que realmente le hace feliz? ¿El instinto de supervivencia que le sobrevino en Canyonlands ha vuelto a surgir en medio de las cuatro paredes del hotel? ¿Es esta pandemia otra prueba de vida como la que tuvo en ese paisaje arenoso años atrás?

Canyonlands: balada de una cuarentena se divide en dos partes: en la primera de ellas, Mike nos cuenta su experiencia en medio de la epidemia en la ciudad de Madrid, mientras que, en el segundo bloque retrata todo aquello que vivió en el desierto de Canyonlands para acabar con un desenlace que planteará muchas enseñanzas al lector.

De la mano del narrador en tercera persona que nos cuenta toda la historia, como si de un reportero se tratase, asistiremos a una revelación única: la capacidad de superación que tiene el ser humano es inconmensurable.

Una novela filosófica, intimista, reflexiva y realista que revive de manera peculiar un paisaje catastrófico en el que todos nos veremos reflejados.

Además, JB Rodríguez Aguilar ejerce un contraste continuo entre lo superficial y lo esencial, entre lo somero y lo profundo, tanto de la propia naturaleza humana como del mundo en el que vive. De tal forma que la narración se convierte en una historia entretenida y trepidante, cuando acompañamos a Mike en sus salidas al epicentro de la pandemia, como también en un relato sustancial y penetrante que nos invita a cuestionarnos lo verdaderamente importante en nuestras vidas.

«Cada jornada, una misión cumplida. El calor, la sed, la fatiga, el padecimiento, el frío, la intemperie, la inmensidad, el silencio… Una prueba de resistencia en condiciones de adversidad y una muestra de superación personal, de supervivencia. Como una cuarentena».

Sin duda, un libro para adquirir cuanto antes y para disfrutar tranquilamente, pues Canyonlands: balada de una cuarentena es una historia que nos recuerda que los momentos más indispensables son aquellos en los que la infinidad del mundo puede retenerse dentro de cada uno y en compañía de nuestros seres queridos.

Nombre: JB Rodríguez Aguilar
Género: novela
Biografía: escritor, traductor y gestor editorial madrileño. Ha completado los estudios de Bellas Artes en la Universidad Complutense y ha trabajado durante catorce años como bibliotecario y gestor del sitio web y redes sociales en la Red de Bibliotecas Públicas Municipales de Madrid. Actualmente se dedica en exclusiva a la escritura, a la traducción y a diversos proyectos editoriales a través de la marca Nexus Literario.Como escritor, ha publicado cinco novelas: Umbrío, entre los muertos (2011), acompañada de la banda sonora original compuesta por el músico Eduardo de la Iglesia; la novela corta La rueda del extravío (2013) y El berbiquí (2014) –todas ellas con Éride Ediciones–; y con Malbec Ediciones: Sones de Iemanyá (2017) y Canyonlands, balada de una cuarentena (2020). Es autor, además, de la colección de relatos fantásticos Cuentos de indagación y neurosis, ganadora del XIV Premio de Cuentos del Ateneo de La Laguna y editada por dicha institución en 2010 (reeditada por Éride en 2015). Ha publicado asimismo numerosos relatos, reseñas y crónicas en antologías, blogs y revistas como Culturamas o Salamandra, así como en la página web del Ayuntamiento de Madrid. Como traductor del portugués al castellano, ha traducido en solitario la novela Los bruzundangas (Rapsoda, 2016), del escritor brasileño Lima Barreto (1881-1922). Y junto a Bethania Guerra de Lemos: las antologías de relatos Cuentos de Madurez (Pre-Textos, 2011) y Cuentos fluminenses (Rapsoda, 2015), de Joaquim Maria Machado de Assis (1839-1908); la novela La corrala (Plaza y Valdés, 2016), de Aluísio Azevedo (1857-1913); y el poemario Días insólitos (Manuscritos, 2013), de Márcio Catunda.
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Obra: Canyonlands: balada de una cuarentena