La poesía

Este género literario, que desde hace unos años ha cobrado el protagonismo que se merece, es la representación literaria de la belleza de las palabras ordenadas estéticamente.

Si bien la poesía tiene en cuenta el lenguaje (semántica, ritmo, silencios, recursos literarios, etc.), en ocasiones puede ir más allá, entendiéndose esta como una expresión sincera y confesional de los sentimientos y emociones que nos quiere transmitir el autor mediante versos.

Puesto que el término «belleza» es algo subjetivo, siempre vamos a encontrar en la poesía esa libertad de la palabra que admite muchos formatos.

Desde hace un par de años a esta parte ha habido un boom con respecto a la publicación de poesía por parte de las editoriales. Eso quiere decir que ahora la gente se acerca a este género literario sin temor, cuando antes parecía relegado a un segundo plano. Editoriales de gran prestigio se han lanzado a sacar a la luz diferentes libros de poesía, los cuales muchos de ellos han sido grandes ventas en las librerías.

Pero para saber un poco más qué esto de la poesía echemos una mirada atrás.

Un poco de historia de la poesía

Según datos históricos, la epopeya de Gilgamesh fue es el primer poema conocido compuesto por cinco partes que relatan las aventuras de un rey llamado con el mismo nombre que da título a la obra.

Más tarde, en la Grecia antigua, se podían distinguir tres tipos de poesía: la épica —como por ejemplo, la famosa epopeya La Ilíada—, la lírica —llamada así porque se servían de una lira para acompañar los versos— y la teatral. Por supuesto, no podemos olvidarnos de los trovadores —Edad Media— y de los haikus —a partir del siglo XVI—.

Ambos marcaron una época y, en el caso de los poemas japoneses, siguen siendo composiciones actualmente usadas a nivel mundial. Con respecto a los trovadores estos eran poetas de alto rango social que recitaban sus versos acompañados de música principalmente en la corte.

A continuación os dejamos un pequeño esquema de los siglos posteriores mencionando a los poetas más importantes y/o populares:

• SIGLO XVI (Siglo de Oro) – Garcilaso de la Vega, San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús, los cuales realizan una poesía más mística.
• SIGLO XVII (Siglo de Oro) – Góngora o Lope de Vega, Sor Juana Inés de la Cruz
• SIGLO XVIII (Ilustración) – José Blanco-White y Manuel María Arjona (ambos de la escuela sevillana), Juan Meléndez Valdés, José Cadalso (ambos pertenecientes a la escuela salmantina).
• SIGLO XIX (Romanticismo) – Destacan autores como Gustavo Adolfo Bécquer, Rosalía de Castro, José de Espronceda.

Poesía del siglo XX

Esta etapa histórica es probablemente la más conocida y estudiada. Se caracterizó principalmente por una temática más realista y de denuncia social y política que rompió los esquemas de estructura anteriores. Estos fueron los principales movimientos:

• Modernismo – Joan Maragall o Rubén Darío.
• Generación del 98 – Antonio Machado y Miguel de Unamuno.
• Generación del 14. Juan Ramón Jiménez.
• Generación del 27. Federico García Lorca, Pedro Salinas, Luis Cernuda, Gerardo Diego, Miguel Hernández, Vicente Alexaindre, Rafael Alberti, Emilio Prados y un largo etcétera de escritores que marcaron también un hito en la historia de la poesía.

Tipos de poesía

Existen muchos tipos de poesía. Por ejemplo, aquella que rima (de forma asonante o consonante) o aquella que otra que se compone de forma totalmente contraria a la anterior llamada poesía de verso libre, en donde no hay métrica (como los endecasílabos, octavillas, sonetos, etc.) ni concordancia en los sonidos de las palabras.

Este tipo de poesía es la que más se utiliza actualmente, aunque esto no quiere decir que si quieres escribir poesía no puedas hacerlo con rimas.

Cómo empezar a escribir poesía

Como hemos dicho al principio de este artículo, la poesía es una manifestación de la belleza a través de las palabras y estructurados a través de los versos. Aunque la literatura no tiene cadenas, no todo vale.

Pero si quieres empezar a escribir te damos una serie de consejos para que te pongas en marcha:

1. Lee y cuando creas que lo sabes todo, sigue leyendo. Muchos escritores afianzados aseguran que después de años publicando sus libros, todavía creen que no lo saben todo sobre la literatura. ¡Nunca se deja de aprender!
2. Lleva un cuaderno siempre contigo. Para escribir todo aquello que se te ocurra. La belleza está en cualquier lado y la inspiración puede llegar en cualquier momento.
3. Apúntate a talleres de poesía. Como cualquier tipo de género literario, la poesía también puede entrenarse. Es cierto que hay gente que nace con un don especial, pero incluso en esos casos, también hace falta un ejercicio continuado para seguir mejorando. Además, la visión objetiva de tus compañeros, como la mirada de un profesional como pueda ser el profesor seguro te ayudará a avanzar a pasos agigantados.
4. Preséntate a concursos. Aunque no ganes. Esto debería ser el último aliciente. Los concursos también sirven de ejercicio para que no dejes de escribir. Esto te ayudará a tener mucha más experiencia pues no dejarás descansar la pluma.
5. Busca espacios donde haya recitales de poesía y apúntate. Otra de las maneras objetivas de saber si lo que haces gusta es subir a la palestra para leer tus textos. Muchos poetas han comenzado así su carrera e incluso existen editoriales que solo publican a aquellos que tienen experiencia en el escenario.

Cómo leer poesía

Antes de leer un poema es aconsejable desprenderte de todos aquellos prejuicios que alertan sobre que la poesía es aburrida o incomprensible.

Octavio Paz decía que hay que acercarse a la poesía con fe, es decir, hay que tener una predisposición positiva y verdadera para que no produzca un rechazo previo antes de leer un poema.   Pues como lectores de poesía debemos acercarnos desde nuestra parte emocional y no racional, ya que este género parte del espectro de los sentimientos y no del de las ideas.

Someramente dicho, la poesía no se trata de entender, sino de sentir.

La poesía y la corrección de estilo editorial 

Unido a lo anterior, esta forma de enfrentarse a un texto poético puede verse también a la hora de enfrentarse a una corrección editorial de este género.

La diferencia entre una corrección de estilo en un texto narrativo (cuento, novela, etc.) y un texto poético es principalmente una: la narrativa tiene un carácter predominantemente racional que genera un universo cargado de objetividad, mientras que la naturaleza de la poesía se relaciona más con una mecánica predominantemente emocional que le otorga de subjetividad al propio poeta.

Dentro del universo narrativo hay ciertas normas y ciertos límites. Sin embargo, dentro del universo poético estos desaparecen. El poeta, pues, cuenta con una libertad absoluta y con un lenguaje personal para construir sus versos, lo que condicionará el rol del corrector de manera determinante.

Es decir, puesto que la poesía se trata de una visión muy personal sobre la estética de las palabras y el mensaje intrínseco de estas, se vuelve complicado «corregir los sentimientos» del autor.

¡En la poesía nada está estipulado! Así que lee y escribe, porque como dice ese sabio refrán: «La práctica hace al maestro». A pesar de estos breves apuntes, la historia la poesía abarca mucho más y son muchos los poetas que han influido tanto en la historia de la literatura como en escritores posteriores.

Pero esperamos que esto te sirva de acercamiento para este maravilloso género literario.

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